Learnability: qué es y cómo promoverla en tu organización

El antiguo modelo de contratación que consistía para los reclutadores en “cuentas con la habilidad A, te contrato para la tarea B” está evolucionando hacia la búsqueda de perfiles versátiles y con curiosidad por aprender, capaces de aplicar tanto habilidades técnicas o strong skills como habilidades profesionales generales o soft skills en un entorno global y cambiante. 

Según el investigador y pedagogo José Antonio Marina, los jóvenes que en este momento se están incorporando al mercado laboral tendrán que actualizar sus conocimientos y habilidades entre 10 y 14 veces a lo largo de su carrera. Ante este nuevo escenario entra en juego una habilidad cada vez más demandada: la learnability.

 

Qué es la learnability

La definición de learnability tiene que ver con avanzar al ritmo que lo hacen la sociedad y las empresas, y con estar en sintonía con un mundo en constante transformación. Por lo tanto, la learnability es la capacidad para aprender nuevas habilidades a lo largo de la vida, para permanecer empleable a largo plazo.

Responder con rapidez a los cambios es algo que se puede trabajar, desarrollar y aprender. De hecho, es una de los rasgos más demandados del siglo XXI que algunos ya llaman la “habilidad del futuro”.

La palabra learnability no tiene traducción al español y por eso se utiliza este neologismo adoptado del inglés, aunque en algunos casos también se usa el concepto “aprendibilidad”. Lo cierto es que, por el momento, ninguno de los dos términos es aceptado por la RAE.

Según Mara Swan, EPV de Manpower Group, la learnability tiene dos dimensiones: La primera es la capacidad de continuar aprendiendo. La segunda es el deseo de conocer por el gusto de conocer, y también la actitud positiva hacia nuevos retos que desarrollen nuevas habilidades. La suma de capacidad más actitud acaba dando como resultado un profesional muy completo y preparado para los cambios que están por llegar.

 

Cómo evaluar la learnability

Una persona con un buen grado de learnability tiene una alta capacidad de aprender y de adaptarse a nuevas circunstancias. Otras características son la curiosidad y la facilidad de desarrollo de talentos y habilidades. Pero, ¿cómo saber si el perfil que tienes delante cuenta con esas aptitudes? Puedes fijarte en estos tres rasgos claves para evaluar la learnability de un profesional.

1. Explorador

Le encanta viajar y vivir nuevas aventuras. Es una persona curiosa y disfruta adquiriendo nuevos conocimientos. Es intelectual, tiene aficiones ligadas a la cultura y puede conversar fácilmente sobre cualquier tema. Tiene facilidad para asimilar nuevos procesos y formas distintas de trabajar.

2. Motivar

Ante todo, tiene la actitud. En ese sentido, desea crecer, aprender, mejorar, sobresalir o tener un desempeño máximo. Por eso es altamente permeable a cualquier estímulo que venga del exterior.

3. Inconformista

Los perfiles con altas tasas de learnability acostumbran a ser independientes, creativos y originales. Apuestan por las nuevas tendencias y suelen ser precursores de la transformación dentro y fuera de las organizaciones.

 

15 técnicas para desarrollar la learnability de tu organización

¿Quieres saber cómo desarrollar la learnability o aprendibilidad en tus equipos? ¿Buscas ejemplos de learnability para aprender a aprender? Aquí tienes algunos consejos para trabajar las técnicas y habilidades con las que empezar a incrementar la capacidad de aprendizaje tanto personal como de tu organización.

1. Promueve el ‘own learning

El aprendizaje individual de nuevas habilidades es una de las mejores estrategias para desarrollar la learnability. Siempre hay alguna actividad que desde hace tiempo quisimos hacer y que, por una razón o por otra, nunca hemos empezado: ¿tocar un nuevo instrumento?, ¿empezar algún deporte?, ¿mejorar las habilidades culinarias?, ¿aprender un nuevo idioma?

Es importante que la nueva tarea genere ilusión a cada persona. También fijar objetivos que sean auto-motivadores, sobretodo si el propósito parece demasiado árduo o lejano de entrada. Observar el propio progreso hace ganar confianza y tener energía renovada para seguir aprendiendo.

2. Explora las necesidades del equipo

Para poder desarrollar nuevas habilidades, lo primero es preguntar ‘¿en qué podemos mejorar?’. Descubrir las debilidades personales y grupales es el paso previo a poder trabajar e incidir en ellas. El resultado de trabajarlas será un conjunto de profesionales mucho más versátiles.

Para conocer un poco mejor al equipo te sugerimos crear un formulario donde preguntes a toda la plantilla cuáles creen que son las áreas en las que podrían mejorar, tanto personales como de su departamento.

3. Apuesta por la formación ‘out of the box

Si quieres contribuir al desarrollo de talentos y habilidades de tus equipos tienes pensar y mirar más allá de lo que conoces. Ampliar el foco es positivo para conocer realidades distintas y tener la mente más abierta. Una buena forma de romper barreras es descubriendo temáticas socialmente transformadoras; por ejemplo, las nuevas masculinidades.

4. Fomenta el desarrollo personal

El desarrollo o crecimiento personal es el trabajo interior que mejora las habilidades personales, pero también el bienestar propio. En ese sentido, el aprendizaje es un proceso donde se modifican y se adquieren destrezas y conocimientos que favorecen el desarrollo de las personas, y viceversa. Para contribuir al crecimiento personal de tus equipos, te recomendamos la formación online en habilidades como la gestión del tiempo, el mindfulness, o el mindful eating.

5. Crea un club de lectura

Cuanto más leemos, más rápido aprendemos y mayor es la learnability. Por eso te proponemos crear un club de lectura que incentive el hábito de leer de tu compañía.

El hábito de leer incrementa la agudeza mental, la capacidad para concentrarse y analizar situaciones complejas, estimula la imaginación, aumenta la empatía y hace que incorporemos palabras y expresiones que crean nuevas conexiones mentales. Como consecuencia, hace aumentar la creatividad y nos vuelve personas más resolutivas.

Puedes programar una reunión del club de lectura una vez al mes, donde elijáis el libro que vais a leer. Podéis alternar libros técnicos vinculados al trabajo con novelas, libros de motivación personal o ensayos sobre temas de interés.

 

6. Impulsa el pensamiento positivo

En los procesos de aprendizaje, como es natural, no siempre sale todo a la primera. Por eso es importante mantenerse positivo, de hecho, se considera una forma de combatir el estrés en el trabajo y en cualquier ámbito de la vida.

Una buena técnica para trabajar el pensamiento positivo es fijar la vista en las metas y dejarnos guiar por ellas. Para aumentar el bienestar en tu organización también puedes ver este webinar con las claves para prevenir el Síndrome del Burnout y evitar que tus empleados lo sufran.

7. Comunica los casos de éxito

Una técnica eficaz para aumentar la learnability es inspirarse en compañeros de trabajo que por su actitud o competencias han superado situaciones complejas y han aprendido a actuar en diferentes roles. Esas personas que Eric Schmidt, ex-director de Google, llamaría learning animals, es decir, perfiles versátiles con hambre de aprender y capaces de adaptarse fácilmente a nuevos escenarios.

Así, compartir los casos de éxito es un modo muy efectivo de generar referentes para tus equipos. Para hacerlo te proponemos crear una newsletter periódica donde se hable de las historias de distintos trabajadores. Por ejemplo: “Te presentamos el caso de Juan. Juan empezó en el cargo de administrativo, se formó mientras trabajaba en nuestra compañía y hoy ocupa el cargo de Director de Área”.

8. Promueve la inteligencia emocional

La inteligencia emocional está profundamente ligada con la learnability. Con la mirada puesta en el futuro, ambas contribuyen a la empleabilidad y son dos habilidades cada vez más valoradas por los profesionales de recursos humanos.

Las capacidades ligadas a la inteligencia emocional son la asertividad, la comunicación no violenta, la resolución de conflictos, la amabilidad y el liderazgo inclusivo, entre otras. Trabajar la inteligencia emocional es una de las mejores estrategias para aprender a aprender y además, nos hará mejores en nuestro trabajo.

9. Incentiva las reuniones ‘one to one

Mark Twain sostenía que “lo problemático no es lo que no sabes, sino lo que sabes con certeza pero que no es verdadero”. Fijar conversaciones periódicas entre managers y colaboradores, favorece que todos puedan expresar sus inquietudes.

Estos encuentros también son un buen momento para pedir feedback sobre el grado de learnability de cada profesional. En definitiva, se trata de maximizar las voces e integrar diferentes perspectivas, con honestidad y, por supuesto, sin juicios de valor.

10. Integra la cultura digital

La gran transformación que vivimos en nuestros días tiene que ver en gran medida con la tecnología y la digitalización. En ese sentido, para mantener la empleabilidad a largo plazo es necesario estar cerca del entorno digital en cualquier función de trabajo. Además, la formación en habilidades digitales puede ser un buen complemento para actualizar los conocimientos de tus equipos.

11. Crea un canal para compartir artículos de interés

La saturación de contenido es uno de los grandes obstáculos que impide el desarrollo de habilidades para el aprendizaje: un exceso de información acaba con la curiosidad. De esta forma, para mejorar la learnability es recomendable no abusar de ese contenido de fácil digestión, asimilable a la comida rápida, tan abundante en la red.

En cambio, el conocimiento de calidad ayuda a traducir la información en experiencia real, es decir, a aplicarlo en la vida diaria. Por ese motivo te proponemos crear un canal de comunicación interna donde los empleados puedan compartir información útil de blogs especializados, revistas y otras fuentes de interés.

12. Incentiva la colaboración entre departamentos

Conectar con distintos perfiles profesionales hace que podamos empaparnos de otras maneras de hacer. Por ello el trabajo interdepartamental es una fuente de aprendizaje asegurada.

Pueden ser colaboraciones de cualquier tipo: Marketing – Ventas, IT – Atención al cliente, etc. Al fin y al cabo, cada área tiene sus propios códigos, y es frecuente que a raíz de una colaboración entre dos departamentos surjan nuevas propuestas de mejora para los procesos y las metodologías internas.

13. Cultiva la proactividad 

Aumentar la learnability tiene que ver con romper el hielo. Con realizar tareas que normalmente no haríamos. Propón retos a tus equipos y anima a que se atrevan a superarse. Como resultado, los trabajadores desarrollarán nuevas habilidades y mejorarán la confianza personal y grupal.

14. Abraza la diversidad

Varios estudios demuestran que tendemos a relacionarnos, tanto ‘on line’ como físicamente, con a aquellas personas que se parecen a nosotros. Pero esa predilección por individuos semejantes tiene un problema: hace que no salgamos de nuestra burbuja, que se compone por el círculo de amistades, profesionales y personas con intereses similares.

Una de las claves para entender la diversidad es saber apreciar otros valores y puntos de vista. Contemplar formas de pensar diferentes contribuye a tener la mente más abierta y a entender mejor el mundo en el que vivimos. A la vez, hará que la adaptación a los cambios sea mucho más rápida. Te recomendamos que eches un vistazo a este post con 15 ideas para promover la diversidad en tu empresa.

14. Organiza sesiones de knowledge transfer

Según Ikujiro Nonaka, profesor de estrategia y gestión corporativa, “la mejor fuente para obtener ventajas competitivas duraderas es el conocimiento”. De este modo, compartir ese conocimiento contribuye al aprendizaje organizacional ya que, a medida que un profesional aprende, también lo hace todo el equipo.

Para las organizaciones, uno de los principales beneficios de la learnability es que la experiencia y el knowhow acumulados se convierten en un activo muy valioso. Una buena manera de multiplicar la inteligencia colectiva es que cada departamento organice una sesión mensual para poner en común las dificultades con las que se ha encontrado, y cómo ha conseguido solucionarlas.

 

e-learning, el aliado de la learnability

El e-learning es una de las herramientas más potentes para el desarrollo de personas y organizaciones. Según Docebo, el 94% de l_s empleados permanecerán más tiempo en empresas que inviertan en formación. El talento demanda cada vez más empresas que se preocupen por sus habilidades y conocimientos.

Para mejorar la capacidad de aprender hay que entrenarla. El problema es que muchas veces cuesta encontrar tiempo y recursos para destinar a la formación. Por ello, la enseñanza virtual tiene ventajas muy significativas respecto a otros modelos de aprendizaje, como ya apuntábamos en este post sobre qué es el e-learning y por qué impulsarlo en tu empresa.

La digitalización logra una formación más flexible donde cada persona se marca su propio ritmo de aprendizaje, permitiendo incorporar el desarrollo de la learnability en el día a día de las organizaciones. También reduce los costes porque elimina cualquier gasto en dietas, material didáctico, desplazamientos o reserva de espacios.

 

Fuente: homuork.com

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